Opinión:
LA BIOTECNOLOGÍA
REPRODUCTIVA COMO HERRAMIENTA PROBADA Y DISPONIBLE PARA EL
DESARROLLO DE PROGRAMAS EN MEJORAMIENTO GENÉTICO BOVINO, DEBE
DEMOCRATIZARSE, DIFUNDIENDO EL CONOCIMIENTO, FORMANDO PERSONAL IDÓNEO,
BAJANDO COSTOS PARA QUE SEA APLICABLE A NIVEL DE CUALQUIER GANADERÍA.
La
inseminación artificial (IA) apareció hace algo más de
sesenta años en el mundo, como herramienta práctica para tecnificar la
reproducción y el mejoramiento genético en bovinos y, desde entonces, sigue
siendo el método más exitoso en lograrlo; las ganaderías
y los países que exhiben mejores hatos productivos son
aquellos en que los gobiernos y /o los ganaderos han implementado
la IA como programa permanente en la reproducción y mejoramiento de la
población bovina de manera prolongada.
La IA está
al alcance de quien quiera adoptarla como práctica de rutina en la finca,
sencilla, económica, segura, el mercado ofrece los materiales y
equipos necesarios, fáciles de manejar, de bajo costo, vale menos que el
toro reproductor, su manejo se puede comparar con el uso del celular,
está al alcance de todos los ganaderos.
Con la IA,
puede llevar a cualquier ganadería el material genético superior, que le
permite mejorar no solamente producción y tipo sino que también para corregir
ubres, patas, pigmentación, vena mamaria, conversión de pasto a carne,
etc; lo que requiera cada ganadero, semen fértil, confiable, de la mejor
genética, de los mejores toros del mundo, incluidos los criollos nuestros, de
las razas que más convenga, desde una pajilla, hasta miles, con pruebas de
comportamiento o de progenie que le garantiza ser mejorante, es decir que
los hijos, serán superiores a su madre en producción y tipo.
También resulta más económico que el uso de toros para monta directa,
desde el punto de vista como inversión.
En el
mundo, los países y las ganaderías que mejor ganado manejan son precisamente
quienes han optado la IA, como método de reproducción y mejoramiento genético.
Posibilita llevar al trópico el material genético de las razas europeas,
necesarias para los cruzamientos en la obtención de animales más productivos a
partir de las hembras de cada región ya adaptadas, sin necesidad de llevar
toros vivos.
En Colombia
existe la IA hace más 50 años, pero hoy sigue siendo el toro para monta directa
el que padrea el 94 % de las hembras en estado de reproducción, esto es sin
duda una cifra para sorprenderse. La IA como programa establecido de manera
adecuada y continua sólo registra un pobre seis por ciento, concentrado
en las ganaderías de razas puras, las de lechería especializada y muy pocas en
los demás hatos de ganadería doble propósito (GDP) y cría.
Los
programas que se inician en buen número, son abandonados ante la más mínima
dificultad o con cualquier pretexto. Falta el recurso humano debidamente
capacitado y motivado. Regalar equipos, pajillas o material de IA como ocurre
con algunas agencias del estado, no soluciona nada, envilece al que
recibe, el ganadero requiere acompañamiento técnico positivo.
¿Cómo se
quiere que el hato nacional mejore como el momento lo reclama,
tanto en la producción de leche como producción de carne, si la cultura
ganadera está aferrada a lo tradicional, existe además carencia de
elementos pedagógicos y técnicos, tributarios, la falta de conocimiento en los
empresarios y también está involucrada la responsabilidad del Estado, en donde
no todos los funcionarios encargados llevan el mensaje franco por
que no saben o no creen?
Las otras
tecnologías de avanzada más recientes, como la transferencia de embriones (TE),
la oferta de semen sexado, la producción de embriones en
laboratorio (in vitro), fundamentales y de mayor impacto en la ganadería,
junto con poder cosechar directamente de los ovarios de las hembras,
realizar todo el proceso de fertilización con los espermatozoides
sexados, pone a disposición del hombre una asombrosa forma de transformar y
mejorar su ganadería.
Desde el
punto de vista técnico, permiten obtener crías machos o hembras, de genética
programada de acuerdo a las particularidades medio ambientales y de manejo,
necesidades o deseos de los empresarios con avances significativos en un
mínimo de de tiempo.
LA MAYOR
LIMITANTE ES LA RELACIÓN COSTO BENEFICIO CUYO MARGEN ES NEGATIVO.
Es
necesario que estas tecnologías probadas y disponibles sean
económicamente costeables, o sea que además de poder obtener
ejemplares de alto valor, se puedan aplicar en los programas de ganadería
comercial, para la obtención de la calidad deseada y rendimiento en
carne y leche a bajo costo.
La IA, la
transferencia de embriones, el semen sexado llevados a la práctica de manera
democrática, masiva, a la mayor escala y por tanto a menor costo, será la
verdadera revolución ganadera en bien del productor, del consumidor y del país.
Estas tecnologías no pueden seguir siendo privilegio de unos pocos
adinerados, en perjuicio de la sociedad al ser excluida, su gran valor se
obtendrá a partir de su democratización.
Heraclio Guevara
Sandoval
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