lunes, 21 de noviembre de 2022

Demogan Todo Por La Paz

Esta semana se llevó a cabo el congreso de Fedegan en Barranquilla. Asistió el presidente Petro y dio un discurso salpicado de noticias.

Petro vuelve y carga contra la ganadería, ese ha sido su discurso con el que no estamos de acuerdo pero respetamos su consistencia, ni da ni ofrece tregua, luego, haciendo uso de su incuestionable parresía, terminó ofreciéndole al gerente de Fedegan que hiciera parte de los negociadores con el ELN. La oferta arrancó aplausos, eso fue bálsamo para el país y ejemplo para que construyamos puentes.

En Demogan invitamos a unos momentos de reflexión y análisis.

Siempre hemos apoyado la paz, estamos seguros es la única forma que el país prospere. Celebramos que ahora Fedegan acepte estar presente en las negociaciones, aunque no podemos dejar de sorprendernos, pues en el pasado atacó la paz que proponía Santos, como si existieran estratos para la paz.

Pensamos que paz hay solo una, es la ausencia de violencia, no de desacuerdo que es connatural al ser humano. La paz se obtiene con verdad y ninguno mejor que Nietzsche para decirlo de manera sencilla: “El verdadero valor de un hombre se mide por la cantidad de verdad que pueda soportar”. Creemos que quienes están dispuestos a aceptar la verdad total pueden avanzar en una negociación de paz total.

Existen dos condiciones importantes para iniciar ese camino: Ser Flexibles y entender que es un encuentro con nuestra espiritualidad; aquí cito a Teilhard de Chardin, religioso jesuita, paleontólogo y filósofo francés que afirmaba que no éramos seres humanos teniendo experiencias espirituales, sino seres espirituales teniendo experiencias humanas. ¿Están los negociadores dispuestos a escalar esos peldaños? ¿Todas las partes quieren la paz?

Nos preocupa el representante de Fedegan que en el pasado ha dado muestras de intemperancia, no se trata de descalificar, pero es menester aterrizar las expectativas de todos. Nadie puede de manera unilateral retirarse o retirar a alguien de una reunión. Esas conversaciones exigen grandeza y desde luego un principio de acuerdo de los roles de cada uno, demanda disciplina, humildad, hablar poco, escuchar mucho, no sobreestimar al interlocutor; el ELN es un curtido negociador, ellos tienen clara la manera de cómo desequilibrar a la contraparte, se han formado en la desconfianza, no subestiman, cada uno conoce su partitura. Se han entrenado y tienen la paciencia que Colombia entera espera tengan los representantes del gobierno.

Petro está cumpliendo como ninguno de los que lo antecedieron sus promesas de campaña, no se trata de estar en desacuerdo, sino de entender que aquí no hay “jugaditas”. Él intenta unirnos entorno a unos ofrecimientos que muchos cuestionamos y sobre los que nos toca “capotear el vendaval”.

El trabajo apenas empieza, la prontitud con la que salieron a reunirse a Caracas da la impresión de que los participantes han tenido reuniones previas, esperamos que no sea así por eso nos atrevemos a sugerir que no improvisen y se preparen bien antes de “abrir plaza”.

La paz no es una ideología, ella es el único puerto donde debemos fondear, es el estado que nos va a permitir el desarrollo de nuestra maltrecha nación, es la única vía que podemos transitar si queremos una nación, es el encuentro entre hermanos, es el momento de agradecer a Santos, Uribe, Pastrana, Betancur. Todos ellos hicieron aportes y sacrificios, el país entero debe agradecerles.

Jose Felix, Demogan acompañará sin protagonismos su trabajo por la paz, anticipamos que será doloroso, cuente con nuestro apoyo, nuestra discreción, nuestra crítica constructiva, nuestra verdad sin pliegues ni rincones oscuros, nuestra esperanza que usted entienda que este es un momento de generosidad de cambio y de unión.

viernes, 11 de noviembre de 2022

Demogan La Leche amenzada

La leche la producen empresarios del campo y está amenazada. El último de los misiles es la leche sintética, elaborada a partir de biotecnología, con levaduras modificadas. Esta es una “Anti-Solución” y una amenaza para nuestro campo. Compartimos algunas razones.

Hoy nuestros lecheros han podido estabilizar sus ingresos por cuenta de los diferentes factores que agitan al mundo. Gracias a “don” mercado nuestros 330.000 predios han logrado que compren su leche sin mayores altibajos, eso ha fortalecido la industria que es aliada obligada de esa prosperidad y desde luego a un millón de empleos que se generan en el campo (Solo con papá, mamá y un hijo que trabajen en la finca llegamos a esa cifra). Hemos repetido una y otra vez que el único producto del campo que genera ingresos de manera regular, aun en las peores recesiones, es la leche.

Ese bienestar puede verse afectado por cuenta de un producto que se elabora en un laboratorio poniendo a trabajar las levaduras. Eso tendría consecuencias también para los industriales, pues les arrebataría una de sus fortalezas que es lo crean o no, el acopio, que en un país como el nuestro exige valor, coordinación, compromiso con la calidad de cada finquero al que le recogen su leche, le da trabajo a muchos transportadores, que derivan su sustento del cumplimiento de esas industrias que algunos critican.      

La leche se ve amenazada por el poco interés que muestran las nuevas generaciones en continuar con el legado de sus mayores.

Es un trabajo agotador, donde los extremos son pan de cada día: frío, calor, granizo, tormentas, se fue la luz, llegó el recibo, no vino el ordeñador, se inundó el potrero, no hay agua, se enfermó la vaca, no llegó el veterinario, el camión de la leche no pasó por cuenta de un derrumbe.

¿Quieren más? Pues les tengo más, nos visitaron los “muchachos” que nos “cuidan” para decir que los costos de nuestra “seguridad” subieron, que la paz total es un cuento, que el hambre sigue, que en diciembre necesitan que les regalemos un ternero para sacrificar, que necesitan transporte, que no hay escuelas, que sus hijas no pueden ir en bicicleta hasta el pueblo.

El homenaje a los productores de este líquido de vida, que alimenta de manera TOTAL, debemos hacerlo de manera permanente.  

Decirles que van a darles créditos con subsidio es insultarlos, pues ellos con su trabajo subsidian la economía, dándonos seguridad alimentaria, así que no hablemos de rebajar intereses, sino que los préstamos reflejen el compromiso con el campo.

Cada finca que se cierra mata las esperanzas de una familia, eso está sucediendo en Europa, donde la pugna no es por los precios, sino por más leche, pero los productores se envejecieron y ya no hay quien ordeñe, llegando a una sin salida, donde las industrias empiezan a cerrar por falta de leche, y los productores con una pequeña parte de los problemas de los nuestros, sacrifican sus animales y venden sus tierras para urbanizar.

Desde Demogan hacemos un llamado a que todos juguemos en equipo, desde el consumidor, pasando por el proveedor de insumos aterrizando en los industriales. Lo crean o no, es la única manera y recuerden que la ganadería es pasión, es entrega, es ciencia, es estudiar todos los días para mejorar a Colombia de manera continua.

Otro día hablamos de carreteras.