viernes, 19 de junio de 2015

DEMOGAN Una mirada a la Parafiscalidad

Opinión
Sector agropecuario
Una mirada a la parafiscalidad

La parafiscalidad agropecuaria es un instrumento de apoyo al desarrollo y modernización del campo para cada subsector que contribuye con la correspondiente cuota de fomento, establecida por ley desde hace más de medio siglo. El Fondo Nacional del Ganado es uno de los 15 fondos que tiene el país en materia agropecuaria y el manejo que viene dándole la Federación Colombiana de Ganaderos está en la mira del Gobierno nacional.

Los fondos parafiscales son contribuciones obligatorias que hacen parte del sistema tributario, ordenados mediante leyes que gravan a un sector o grupo económico -en este caso el agropecuario- con la finalidad de ayudar a la financiación de actividades propias para su desarrollo. Estos fondos se diferencian de los impuestos en que, siendo recursos públicos, no hacen parte del presupuesto general de la nación, por lo que exclusivamente deben destinarse en favor de los mismos productores gravados.
El recaudo, administración, inversión o destinación, puede estar a cargo de una entidad particular, preferentemente gremial, que reúna los requisitos de representación democrática de los gravados, que sea incluyente, con transparencia en todos los actos y que haya celebrado un contrato especial con el gobierno, sin que por ello se pierda el carácter de recursos públicos; lo que quiere decir que en ningún momento pueden convertirse los recursos en privados. La consecuencia para estos particulares que asumen funciones públicas es que son responsables, no solamente por acción sino también por omisión o extralimitación de funciones, bajo la vigilancia de las entidades de control, específicamente la Contraloría General de la República (CGR) y del Ministerio de Agricultura y Desarrollo Rural (MADR), que es quien firma los contratos en nombre del Estado.
La ciudadanía en general y los productores gravados, en particular, tienen derecho y deben ser veedores permanentes, en defensa de los propios intereses del sector. Lastimosamente, no se ha hecho pedagogía para difundir entre la población gravada, el conocimiento que debe existir sobre parafiscalidad y sus recursos en cuanto funcionamiento jurídico, administrativo y financiero, además de la forma democrática, transparente y equitativa con que se deben administrar con los servicios.
Los cuestionamientos hechos por los productores y confirmados por las entidades de control del Estado y por el propio MADR a sectores de la parafiscalidad agropecuaria, no son por su existencia misma, se cuestiona la manera como se recaudan y administran los recursos; en donde algunos de los gremios que administran, carecen de democracia, transparencia y eficacia, olvidan el principio de equidad, desvirtuando su esencia y en vez de resolver los problemas, pasan a incrementar la desigualdad rural y engendran inconformidades y violencia. Los fondos parafiscales no son para resolver problemas gremiales. Estos, administrados con idoneidad y pulcritud, son garantía de crecimiento productivo y de mejora de la calidad de vida de los empresarios, deben servir de herramienta de paz.

Fondos parafiscales y sectores vinculados
En los sectores agrícola y pecuario son 15 hasta hoy los fondos vigentes. El más antiguo, grande, representativo, de mayor cobertura, más democrático y reconocido como emblemático, es el de los cafeteros, administrado de manera ejemplar por la Federación Nacional de Cafeteros. De los restantes 14, tres son pecuarios y 11 agrícolas, todos administrados por sus correspondientes agremiaciones. (Ver tabla 1)


En concordancia con el último informe de la CGR, los 15 Fondos Parafiscales de Fomento del sector agropecuario en el período 2008 al 2012 manejaron más de $10 billones de pesos; de los cuales $341.000 millones corresponden a los 11 Fondos del Fomento Agrícola, $601.000 millones a los tres fondos de fomento pecuario y el resto al Fondo Nacional del Café.

Fondo Nacional del Ganado
En los 20 años de existencia del Fondo de Fomento Ganadero y Lechero (FNG), administrado por la Federación Colombiana de Ganaderos (Fedegán), ésta ha manejado más de un billón de pesos del parafiscal, entre recaudo y rendimientos financieros del FNG. En los últimos años, el reporte de recaudo ha sido una suma aproximada a los $77.000 millones por año.
Se estima que son 450.000 ganaderos los que pagan el parafiscal; como cuota por leche, el 0.75% del valor de cada litro vendido y, por ganado, el 75% del SMDV. Este año se viene pagando $15.200 pesos por cada bovino o bufalino en el momento del sacrificio, sin importar el valor del animal, raza, peso o género. Los ganaderos denunciaron las inconformidades e irregularidades ante las entidades de control, CGR, la Oficina de Transparencia de la Presidencia de la República, la auditoría externa contratada BDO, Cámara y Senado de la República y el MADR, todos establecieron que Fedegán carece de suficientes estándares de democracia, transparencia y eficacia en el manejo de los recursos.
El gremio que administre parafiscales debe estar integrado por el universo de los gravados y así ejercer el concepto de democracia, siendo incluyente en la participación de las decisiones y recibir servicios derivados del parafiscal. Fedegán excluye a los gravados: lo conforman solamente algunos comités afectos al jefe, que en total apenas representan un escaso 8% de los ganaderos que aportan al fondo. Las organizaciones gremiales no aportan al parafiscal; en el caso de Fedegán, ésta no representa democráticamente a los ganaderos y algunos de sus directivos de gremio no son ganaderos, estos pagan cuota de sostenimiento pero no la contribución parafiscal.
Mediante acto administrativo, el MADR le notificó a Fedegán para que en un plazo de seis meses -que vencieron el 18 octubre de 2013- enmendara sus carencias, respondiera por los hallazgos, se actualizara, modificara sus estatutos e hiciera los cambios necesarios para ser democrática, porque de lo contrario no podría legalmente renovar el contrato. Ese acto administrativo no se ejecutó, pero tampoco se derogó, está vigente y el Ministro puede estar incurso en prevaricato por omisión. Fedegán se niega al cambio y el MADR le concede una prórroga que se venció el 30 de junio pasado. Tras la nueva negativa de la federación, el MADR le prorroga condicionalmente el contrato de recaudo y administración del parafiscal con vencimiento el 31 de diciembre de 2014, con la firma del viceministro de obras públicas, porque el Ministro del MADR de esa fecha (Rubén Darío Lizarralde), se había inhabilitado para hacerlo.
La cuota de fomento ganadero y lechero, al igual que el Fondo Nacional del Ganado, fueron creados por la Ley 89 de 1993, cuyo recaudo y administración se delegó a Fedegán mediante contratos especiales, firmados con el MADR por períodos de 10 años, habiéndose vencido el último en marzo pasado.
Si bien es cierto que fue Hernán Vallejo Mejía, en su período de presidente ejecutivo de Fedegán, quien lanzó la iniciativa e impulsó la parafiscalidad ganadera, y que con los ganaderos, la clase política y el apoyo de muchos otros sectores se logró su aprobación, no es menos cierto que tal circunstancia no le da derecho a Fedegán para que los recursos públicos, que pagan los ganaderos, queden a su libre manejo y fuera del control del Estado. Ni tampoco es cierto, que nadie más que Fedegán puede administrar el recurso.
Para que Fedegán pueda administrar nuevamente la parafiscalidad, debe responder por los cargos pendientes, ante los propios ganaderos gravados, las autoridades de control, el MADR, la Oficina Anticorrupción, la CGR, auditoría externa BDO y cumplir con lo ordenado en la sentencia de la Corte Constitucional. Recordemos algunas de las causas más importantes:
1. Que Fedegán dé cumplimiento al acto administrativo con radicado No 20131100074081 del 16 de abril de 2013, emanado por el MADR, mediante el cual le notificó un plazo de seis meses, para que adecuara los estatutos, modificando su estructura. El plazo venció el 18 de septiembre de 2013.
2. La Superintendencia de Industria y Comercio mediante resolución motivada sancionó a Fedegán, con multa de $300 millones de pesos y a su Presidente José Félix Lafaurie, con $30 millones de pesos, por incurrir en prácticas de monopolio y monopsonio en la compra y en la venta, respectivamente, de la vacuna contra la fiebre aftosa; situación que no ha cambiado, continúa el monopolio sin modificación alguna.
3. Que le dé cumplimiento a lo ordenado en la sentencia de la Corte Constitucional, en cuanto que para poder administrar los recursos parafiscales, tiene que demostrar amplios estándares de democracia, estableciendo el derecho a pertenecer de todos los gravados por el sólo hecho de pagar los parafiscales de leche y/o de carne, democratizando los servicios con cobertura a todos los ganaderos. Actualmente no llegan a más de un 8% que son los pequeños grupos y personas incondicionales. Una gran inequidad, 450 mil ganaderos depositan diariamente dinero de su trabajo y Fedegán lo lleva a fines distintos, generalmente a negocios fallidos, o para una lista fija de amigos.
En el informe de auditoría externa de la firma BDO dice que “mientras los recursos de apoyo y asistencia a pequeños ganaderos son escasos, se encontró que una finca del presidente de Fedegán, José Félix Lafourie Rivera, se benefició de estos dineros en una extensión mayor”.
4. Fedegán modificó sus estatutos para crear la figura del “representante legal suplente”, para que sea éste y no el representante legal principal, quien firma el contrato de la parafiscalidad, responsabilidad que recae sobre el secretario general, pero el ordenador sigue siendo el presidente ejecutivo, José Félix Lafourie Rivera; esta novedosa e injustificada figura se ha prestado para ambigüedades y evadir la responsabilidad ante el MADR. El contrato debió firmarlo el representante legal y no el suplente, dada la magnitud de la responsabilidad que debe tener relación directa con el ordenador y no con el subordinado de quien ordena el gasto.
5. El Fondo Nacional del Ganado debe recuperar su casa sede, la cual hoy es propiedad de Fedegán, de forma “poco clara” u oscura. El valioso inmueble fue adquirido mediante negociación cerrada a favor de Fedegán. Esta transacción es, a todas luces, irregular con las ventajas a favor de la federación, en donde el representante de Fedegán, a su vez es parte de la junta directiva del FNG y actuó en el negocio.
6. El Informe de BDO y del MADR refiere como hallazgos, gastos que siendo propios del funcionamiento de Fedegán fueron cargados a los recursos del parafiscal de manera inapropiada, entre ellos se mencionan: $ 160.764.628 en el montaje para la realización del congreso del gremio; $119.259.600 en compra de maletines, $218.954.88 pagados al presidente ejecutivo Lafourie Rivera, por concepto de viáticos, sin incluir tiquetes aéreos, más $351.159.759 en pagos a su conductor y escoltas en el período auditado. Uno de los informes dice: “En este caso el fondo parafiscal (y no Fedegán) terminó haciendo pagos al doctor José Félix Lafourie Rivera durante el período analizado por más de $500.000.000, cuando éste no aparece como funcionario del FNG”.
7. Fedegán presenta la campaña contra la fiebre aftosa como su mayor logro en los años de administrador del FNG. Sin desconocer que hoy el país está libre de dicha enfermedad, gracias a la vacunación, la realidad es que la labor la realizan las organizaciones regionales y Fedegán hace una intermediación sancionada y costosa para el ganadero, quien paga doblemente. Según un informe, en un ciclo de vacunación en el primer semestre del 2012, Fedegán se quedó con $ 4.464 millones de pesos como resultado mayor valor cobrado. De esta forma, la federación obtiene unas utilidades indebidas que, para las cuentas, son de 12 ciclos más.
8. De las inversiones hechas por los ganaderos y el propio FNG en los cuatro frigoríficos, hoy Friogán, no solamente se saturaron de pasivos sino que no han podido pagar a tiempo sus compromisos; los embargaron y dan pérdida todo el tiempo, mientras los demás 40 frigoríficos no administrados por Fedegán, informan utilidades en sus balances. Estos comprometieron el patrimonio del FNG como garante en más de $ 40.000 millones con la banca, desviaron (a negocios flacos) el objeto del parafiscal, que debe ser el impacto en ingresos a los ganaderos y, por el contrario, se dedicaron a vender servicio de maquila a los industriales y comerciantes, mientras la empresa sigue inviable.
9. Fedegán, ni sus directivos, como entidad gremial plural y democrática, puede hacer política partidista. Sus directivos, quienes a su vez lo son en el FNG, hicieron proselitismo públicamente a favor de un partido y en oposición a otros. El ejercicio político debe hacerse por fuera del gremio, pues este debe ser neutral. Enmascararon recursos del parafiscal en actividades politiqueras.
El gobierno, en cabeza de los funcionarios encargados del sector agropecuario y su control, será el responsable del futuro sobre la parafiscalidad ganadera; Fedegán es libre de modificarse o no y, en caso que no hacerlo perdería la opción de la administración de los parafiscales.

Heraclio Guevara Sandoval

Destacado en círculo

Los fondos parafiscales no son para resolver problemas gremiales.

Tabla 1. Fondos parafiscales y sectores vinculados
Fondo
Administrador
Fondo Nacional del Ganado
Fedegán
Fondo Nacional de Fomento Porcícola
Asociación Nacional de Porcicultores
Fondo Parafiscal de Fomento Avícola
Fonavi
Fondo Nacional de Fomento Hortofrutícola
Asohofrucol
Fondo Nacional del Cacao
Federación Nacional de Cacaocultores
Fondo Nacional de Fríjol y Soya
Asociación de Cultivadores
Fondo Nacional del Caucho
Asociación de Cultivadores
Fondo de Fomento del Algodón
Cultivadores agremiados
Fondo de Fomento Tabacalero
Asociación de cultivadores
Fondo Nacional de Leguminosas
Asociación de cultivadores
Fondo Nacional Cerealista
Fenalce
Fondo de Fomento Palmero
Fedepalma
Fondo de Fomento Panelero
Fedepanela
Fondo Nacional de la Cuota de Arroz
Federación Nacional de Arroceros


No hay comentarios:

Publicar un comentario