Desde los inicios de Demogan,
le hacemos seguimiento a la necesidad o no de tener un intermediario para la
venta de la vacuna antiaftosa. No encontramos explicación, para que Fedegán
continúe afirmando que es gracias a ellos que Colombia es hoy: “País libre de
aftosa sin vacunación” Insistimos, que es en primer lugar gracias a los
ganaderos, a los laboratorios y sin duda a los comités municipales y
departamentales; sin olvidar desde luego que algunos departamentos y municipios
apoyan la labor, para que la vacuna sea aplicada en la mayoría del territorio.
Lo paradójico, es que los
ganaderos la pagan DOS veces: La primera cuando les retienen el dinero para el
Fondo Nacional del Ganado que a su vez contribuye con sumas muy considerables,
que deberían ser auditadas prolijamente por una auditoría forense, para que
todos entendamos la manera como se aplican esos dineros a pagar la vacuna. La
segunda, cuando le llega a su finca el producto, y deben pagar $1,050 por dosis.
La realidad de esta
intervención señores ganaderos, es que la vacuna es utilizada por Fedegan para "vacunar" comités que no obedezcan sus órdenes, para exigirles compromisos a los comités, que deben
aceptar sin chistar. Tenemos la preocupación, que la utilidad no es la misma para
cada comité, no existe una política de reconocimiento, que permita a quienes
verdaderamente laboran en el campo, entender o discutir el porqué de esas
diferencias. El margen se decide de acuerdo con genuflexiones sin tener en
cuenta las dificultades que cada uno tiene. En Demogan nos hemos recorrido el
país ganadero preguntando las veces que llega Fedegán a supervisar el trabajo,
las respuestas no cubren nuestras expectativas, pues no se cumple con los protocolos de vacunación, utilizándose una y otra vez la misma aguja y se cambia solo cuando se parte, la cadena de frío no tiene responsable, el trabajo pedagógico que debe adelantar el gremio que se lucra con el negocio no es poco o inexistente.
De acuerdo con la auditoría
que el ministerio hiciera en su momento, en el único semestre que pudieron
revisar los auditores, la utilidad de Fedegán por eso concepto excedió los
$4’000 millones.
Hoy Colombia cuenta con dos laboratorios que suministran la vacuna, ambos de clase mundial. Ambos laboratorios deberían participar en proporciones de 55% Vecol, 45% Limor, no siempre se da esa figura, poniendo en ocasiones en riesgo las campañas de vacunación.
Fedegán es el único comprador
y el único vendedor, privando al sector de la sana competencia. ¿Es eso justo
con el sector? No lo creemos ¿Es aceptable esa figura para la Superintendencia?
De manera respetuosa pero
firme, le solicitamos al Ministerio de Agricultura, que le entregue la
responsabilidad de la venta y distribución, a los laboratorios y comités, para que adelanten la campaña sin peajes, para que todos entendamos, en que se invierte los $52 mil millones del Fondo Nacional del Ganado, para
apoyar un trabajo que solo entienden a puerta cerrada en Fedegán, y le expliquen a los ganaderos la realidad de esa inútil intervención.
Si
ese gremio, quiere continuar administrando la vacuna, que se democratice y
entienda de una vez por todas que si una asociación maneja fondos parafiscales,
que son de todos los ganaderos, debe permitir a TODOS ellos la posibilidad de
revisar sus cuentas, su organigrama, los salarios que le pagan a sus
principales ejecutivos y claro está, nos explique las ventajas de su
intermediación.
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